Ministerios Educativos, Una Necesidad Urgente

09.12.2021

y hay diversidad de ministerios, pero el Señor es el mismo."  -  1 Corintios 12:5

Sin duda, muchos cristianos están relacionados con diferentes ministerios como el evangelismo, la visitación, la escuela dominical, ministerio juvenil, de damas, de varones, etc.; sin embargo, escasas iglesias tienen un ministerio educativo como parte de sus actividades; y no me refiero a una escuela cristiana que actúa como un colegio adjunto sino netamente como un ministerio.

Es por ello que este artículo tiene como objetivo, en primer lugar, hacer ver la necesidad urgente de implementar ministerios educativos que sean dirigidos desde una perspectiva bíblica; y en segundo lugar, cómo iniciarlos y qué recursos se necesitan.

La Urgencia

Sería un tanto necio de nuestra parte seguir creyendo que nuestros hijos no son uno de los objetivos de este sistema mundanal en el que vivimos. 

Si pensáramos en algún lugar en donde se observen los siguientes elementos: perversidad sexual, acoso o bulling, ambiente lleno de violencia, vocabulario soez, depravación, mundanalidad, ideologías demoníacas tales como la ideología de género, falta de ética, falta de atención, bajo desempeño, etc.; no estaríamos hablando de un burdel, ¡sino de las escuelas actuales!, que si bien han dejado de ser momentáneamente foco de atención, por la actual situación de "pandemia", sin embargo, poco esperamos que estas situaciones cambien, cuando se normalice la vuelta presencial escolar.

Imagina a tus hijos educados en un cuartel equivocado, ¿qué esperas obtener? ¿un servidor de Jesucristo o un servidor de este mundo?

Es evidente que la agenda de este mundo está enfocada en adoctrinar a nuestros hijos, y lo harán por medio del sistema que todo el mundo acepta y nadie refuta: la escuela. 

Ya el pensamiento de tolerancia (respeta mis pensamientos) y neotolerancia (respeta mis pensamientos o te ira mal) está implantado en las escuelas públicas, y que retrocedan en sus planes, simplemente es impensable. Adoctrinarles, es el objetivo. Un niño educado o adoctrinado por una agenda contraria a nuestra fe, simplemente será, espiritualmente hablando, un arma no sólo de escaso poder, sino inútil.

Es sumamente urgente que actuemos, ya sea como pastores al ver el rebaño infantil y juvenil como un grupo realmente importante o como padres, ante una necesidad apremiante. Alguien dijo: "si quieres verte con cabello en diez años, será mejor que lo cuides desde hoy"; y podemos decir también, que: "si quieres verte como pastor con una congregación no mundana y una iglesia cuyo objetivo sea glorificar y vivir para el Señor, será mejor que la empieces a cuidar hoy mismo". 

Al igual que muchos pastores, también muchos padres tienen un concepto equivocado de cómo se debe enfrentar la problemática actual de la educación de los hijos, pues caen en la postura de decir: "pues todo irá de mal en peor". Es la típica postura de: "pues ya ni modo". Si esta forma de pensar fuese realmente correcta, imagínense que hubiese sido del pueblo de Israel, cuando el malvado Amán trazó un complot para acabar con ellos. Fue precisamente un Mardoqueo, que movido por la necesidad de su pueblo, habló a la reina Ester para que hiciese algo, pues, tal como le dijo: "para esto has llegado hasta acá".

Bueno, quizá digas: "de acuerdo, entiendo la importancia, pero yo realmente soy incapaz, no tengo el conocimiento, ni la experiencia, ni conozco la forma de hacer que un ministerio educativo funcione." Y a decir verdad, eso es muy cierto, pero regresemos a 1 Corintios 12:5: "Hay diversidad de ministerios, pero el Señor es el mismo". Dios no cambia, y si ayudó a Ester y a Mardoqueo en su ministerio de salvar a su pueblo, lo hará también en un ministerio educativo para preservar a los niños y jovencitos que necesitan ser rescatados. En mi propia experiencia he visto cómo escuelas cristianas adjuntas a una iglesia local, han podido desarrollarse con la simple colaboración de las madres de familia. También he visto otras iglesias que teniendo tanto profesionista o incluso docentes retirados, dudan sobre cómo hacer que inicie un ministerio a todas luces urgente.

La indiferencia ante la necesidad, nos ha hecho pecar contra Dios. Quizá el pecado mas grande con el que una iglesia cargue, es la indiferencia. Cristo dio una de las mayores amonestaciones en su ministerio, precisamente a las ciudades de Corazin, Betsaida y Capernaum, quienes residían en una planicie ubicada al noroeste del mar de Galilea, en una tierra muy fértil, con bastedad de agua y fructífera. Sin embargo, a pesar de los milagros realizados allí, su indiferencia los hizo merecedores de los fuertes pronunciamientos del señor Jesús, pues a pesar de la cantidad de milagros que pudieron apreciar, simplemente se sentaron a disfrutar de su agraciada vida. ¿No debieran los bendecidos y perdonados por Dios, mostrarse más agradecidos, tratando de ser de bendición a otro? O quizá estemos en la postura del rey Ezequías, en 2 Reyes 20:16-19, que siendo avisado de que perdería todo, que sus hijos serian eunucos y sirvientes en otro palacio, expresó indiferente: "bueno, al menos habrá paz en mis días". ¿Será que es lo mismo que está pasando hoy con muchos padres? Que estén pensando en: "pues a ver como se las arreglan mis hijos después". ¿No será esto la falta de amor que Jesús predijo que vendría?

Es imperante que la iglesia de Cristo haga lo propio por rescatar a las generaciones que deben ser para Dios, de las mandíbulas de un mundo pervertido hasta el extremo.

Pero... ¿Como Empezar Un Ministerio Educativo?

Sin duda hay que dar ciertos pasos, pero debemos entender que:

  1. Un ministerio Educativo no es un negocio. Una escuela perse, es realmente un negocio muy rentable. Pero si esto es lo que se busca, mejor no lo empiece en la iglesia, pues estará alejando a las futuras generaciones de conocer a Cristo. Ahora bien, con esto no decimos que no debe haber una retribución económica, lo cual, es completamente bíblico (1Tim.5:18), sino que, el fin no es formular un negocio que olvide que llevar a los alumnos al conocimiento de Cristo en cada materia, ciencias, matemáticas, lengua, etc., es el objetivo. Así pues, entendamos que un ministerio es un servicio a otros. En 1 Cor. 12:5, la palabra ministerio proviene del griego "Diakonia" que significa servicio.

  2. Se debe establecer un principio rector. Este principio te permitirá trabajar cambiando en ocasiones la metodología, pero jamás el objetivo. Por ejemplo: el principio rector que hemos establecido en los dos últimos ministerios que hemos implementado es: "Espiritual - Ético/Moral - Académico" y este principio no puede revertirse. Jamás pondremos por encima de la parte espiritual la formación académica, porque tendríamos alumnos con excelencia académica, pero tan perdidos como cualquier otro. Rumbo al infierno. Es nuestro objetivo siempre mostrar el evangelio y éste objetivo, jamás podrá ser menoscabado por alguna actividad u objetivo académico. Luego el ético/moral, obviamente basado en la palabra de Dios y no en los libros de texto, donde la ética y la moral, son  basadas en pensamientos humanistas y completamente ateos. Por último, sin ser una educación académica de bajo nivel, se debe implementar ésta con el fin de que los alumnos aprendan constructivistamente (formando un criterio propio), y no que el objetivo sea que solo avancen de grado (como sucede en los actuales sistemas académicos públicos).

  3. Reúne un equipo de trabajo que tengan la misma carga. Y decimos la misma carga, no la misma capacidad. No esperes a que llegue alguien de gran capacidad; y aunque carga más capacidad serían excelentes, siempre es imprescindible que tengan la misma carga por la educación correcta y bíblica para sus hijos o su pequeño rebaño. Ellos deberán aprender que su motivación no es la ofrenda que habrán de percibir, sino la trascendencia que tendrán en los alumnos con el correr del tiempo.

  4. Haz conciencia en que el objetivo no son los documentos. Muchos padres antes de preguntar alguna otra cosa, inquieren si hay certificación, si las boletas son reales, si tendrán problemas para meterlos a otra escuela si deciden sacarlos del ministerio, etc., y aunque son preguntas validas para un padre, debes siempre crearles la conciencia de que Dios es quien resuelve esas cosas, y obviamente tu trabaja en ellas. Muchas veces los padres de hijos cristianos no optan por un ministerio porque tienen incertidumbre de qué pasará después, y es que después de tantos años con el pensamiento de que mis hijos deben ser educados por el estado, cambiar el chip, es difícil, pero se debe hacer. En nuestra experiencia, Dios siempre nos ha dado la salida, no ha sido sencilla eso es cierto, pero al final los alumnos tienen su documentación. Dios provee incluso esto.

  5. Involucra a la Iglesia. Una necesidad imperiosa, si habrás de empezar un ministerio educativo cristiano, será el involucramiento de la iglesia. Cada miembro de la iglesia debe sentir que puede participar del mismo, siempre respetando el orden y las reglas debidas. Pero alejarlos de la iglesia, dificulta el desarrollo del mismo. Un requisito que hemos puesto para los ministerios que hemos abierto es: "Para que un maestro sea maestro en nuestro ministerio, debe primero serlo en la iglesia." Es más difícil que tengan una carga académica correcta,  si no han tenido la carga espiritual por esas almas. Involucra a la iglesia en orar por el ministerio, en cooperar para actividades, en acompañarlos a actividades como salidas a museos, días de campo, etc. Invita a algún hermano fiel a dar algún devocional a los niños, invita a algún hermano que tenga algún oficio, a que comparta talleres con ellos, etc.

  6. Planea y busca mejoras. Aunque hemos dicho que no es más importante la capacidad que la carga, sin duda debes empezar con un plan, una estrategia, formulando calendarios, etc. Y esto no debe pasar de 3 meses de trabajo, porque las cosas se enfriarán. En el primer ministerio empezamos con libros de un cierto nivel académico y aunque estaba planeado, tuvimos que ir buscando mejorar, fuimos de libros de INEA (Educación Integral Para Los Adultos), incluso examen Ceneval, luego pasamos por nuevo material impreso con enfoque cristocéntrico: "Libros Águila" (excelente material), sin embargo como éramos muy pocos maestros y se requerían maestros por grado académico con este recurso, tuvimos entonces que buscar algo más, encontramos entonces algunas plataformas en línea como la de Educazion; ahora combinamos varias de estas opciones con el fin de mejorar su experiencia de aprendizaje. ¡Vamos!, lo que quiero decir es que no puedes quedarte con solo una opción, ni pensar que es la única, sino que debes ir buscando mejoras. Utiliza las herramientas que están disponibles para que seas mas eficiente en tu trabajo.

  7. Enfócate en educar a los padres. ¡Uf!, el paquete más difícil con el que habrás de cargar será sin duda los padres, quienes creen que la escuela es una guardería y que debes hacer la labor que a ellos les toca bíblicamente (pues así han sido adoctrinados ellos mismos por muchos años) pero ya es hora de cambiar esa perspectiva. Ellos deben saber que solo somos coadyuvantes de su propia responsabilidad, la de educar a sus hijos. Es necesario que refuerces desde un principio este pensamiento y cada vez que aparezca ese pensamiento, lo neutralices de una. Serás con este ministerio un apoyo a los padres y no al revés.

Si me dijeran que si vale la pena hacer toda esta labor por influir en esta nueva generación, sin duda te diría ¡si vale la pena! Es una necesidad urgente. Debemos ofrecer al Señor, una generación que le glorifique, que trascienda y que sea útil en su reino, es decir: soldados adiestrados en el cuartel correcto.

Miguel Ángel Velázquez y Sra. Esperanza


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